Ya mencionamos la importancia de despertar la curiosidad en los niños, y como los experimentos caseros podían lograrlo. El día de hoy, proponemos un sencillo pero divertido experimento.
El objetivo es lograr que una burbuja quede flotando dentro de un frasco, sin tocar las paredes y el fondo del mismo. Eso se conseguirá, gracias a las pequeñas burbujas de dióxido de carbono que saldrán de la reacción química entre el vinagre y el bicarbonato de sodio.
El objetivo es lograr que una burbuja quede flotando dentro de un frasco, sin tocar las paredes y el fondo del mismo. Eso se conseguirá, gracias a las pequeñas burbujas de dióxido de carbono que saldrán de la reacción química entre el vinagre y el bicarbonato de sodio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario